
El corazón junto con los vasos sanguíneos forman el aparato circulatorio. El corazón es el órgano principal, su función es bombear con cada latido oxígeno y nutrientes hacia todas las células y eliminar los desechos y el dióxido de carbono del organismo.
De manera simplificada, podemos decir que el corazón se divide en cuatro cámaras: dos superiores, llamadas aurículas y dos inferiores llamadas ventrículos.
1- Aurícula derecha: recibe la sangre pobre en oxígeno que proviene de todo el cuerpo.
2- Ventrículo derecho: envía la sangre a los pulmones para que se oxigene.
3- Aurícula izquierda: recibe la sangre rica en oxígeno que proviene de los pulmones.
4- Ventrículo izquierdo: envía la sangre rica en oxigeno a todo el cuerpo.
Toda la sangre se mueve a través de los vasos sanguíneos, que hacen el papel de tuberías y recorren todo nuestro cuerpo, dando vida a nuestros pulmones, riñones, estómago, cerebro, etc.
Si en algún momento estos vasos llegan a obstruirse se crea un serio problema. Esto puede suceder a lo largo de la vida, principalmente por malos hábitos, lo que denominamos factores de riesgo.
En un posterior artículo os hablaremos de los principales factores de riesgo cardiovascular y de cómo podemos reducir el riesgo de sufrir trastornos cardiovasculares.
Estad atentos.